Pasar el fin de Año con los Hermanos de Taizè en Estrasburgo 2013-14

Un año más, he elegido el mejor plan, este fin de año he vuelto a asistir con la acogida de Taizé de Valencia al encuentro internacional que organiza la comunidad ecuménica de Taizé. Este año el país de destino era Estrasburgo, una ciudad muy internacional puesto que es sede del parlamento europeo.
Me encontré con una ciudad muy navideña, muy bien ambientada con su bonito mercado en pleno centro.

Dentro del extenso programa que comprenden estos encuentros, yo seleccioné dos workshops, uno de ellos en el museo de arte moderno de Estrasburgo, titulado "Finding God in twentieth-century art? Presentation of some artworks and visit to the Museum of Modern and Contemporary Art in Strasbourg. Me gustó mucho en la introducción previa a la visita, cuando el hermano nos comentó que "el Arte es arte, y que no debemos exigirle que nos diga algo, hay que cogerlo con humildad con las manos vacías sin esperar nada".

En el siguiente vídeo, un voluntario nos explica en inglés el cuadro "Cristo dejando el Pretorio" de Gustave Doré en el Museo Arte Moderno de Estrasburgo. El cuadro es enorme 6 metros de alto x 9 metros de ancho. Toda una pantalla de cine Wide-Screen, donde el gran realismo del movimiento reflejado en la monumental escena histórica dejan impresionando al espectador.

En este vídeo, un voluntario catalán nos cuenta su experiencia con la obra de Daniel Dezeuze, Echelle de bois, 1974. Bois de placage peint. Habla sobre nuestra necesidad de entender la obra que tenemos delante y nos invita a ir en silencio a recibir...El artista prepara un espacio para que pase algo, pero no pasa nada, ¿Qué pasa cuando no pasa nada? ¿Es sólo un marco?

Otro de los workshops de Taizé, fue asistir a una mezquita, como se muestra en el periódico de Estrasburgo, los medios se hicieron ECO de la repercusión de estos encuentros ecuménicos, en la imagen se observa una monja en la parte destinada a los hombres de la mezquita. Todo un encuentro digno de recordar.

Visita a la catedral de Estrasburgo, muy bonita, muchísimos peregrinos asistimos a las oraciones, destacar la columna de los ángeles y el reloj astronómico.

Taizé no sería lo mismo sin los encuentros internacionales de nochevieja, todos los años nos reunimos todos los del grupo destinado en esa parroquia y compartimos los bailes típicos de cada uno de los países. Como se puede ver en el vídeo, nuestros amigos y compañeros de Ucrania nos enseñan un divertido baile/juego típico de su país.

Son muchos los recuerdos que uno guarda de estos encuentros, para mí una de las experiencias más bonitas es la de la "acogida". Dejarse acoger por una familia de Estrasburgo es toda una lección de "Confianza" que sin duda recomiendo. A continuación en la foto, con nuestra madre adoptiva y su hijo. Guardo muchísimo agradecimiento a la familia por esta experiencia, sin duda fue muy emotivo compartir el día de año nuevo comiendo con nuestra nueva familia adoptiva.

Quiero concluir resaltando la impactante experiencia de Vida, de uno de los integrantes del grupo de acogida a peregrinos, en el pueblo de Brumath. El hombre compartió con nosotros su historia y yo aquí me veo con la obligación de compartirla. Estoy seguro que para ninguno de los asistentes pasó inadvertida. Empezó contándonos que en su anterior vida de éxito profesional, él era un afamado empresario australiano, donde el éxito era su principal objetivo. Todo se resumía a crecer en los negocios y ganar más dinero. Hasta que un buen día despidió a uno de sus empleados, y no le dio más importancia. Pero no fue así, pasado un tiempo llegó la mujer del hombre contándole que aquel hombre se había suicidado y que su marido antes de morir le había escrito una carta dirigida a él. Y a partir de ahí, como desde este momento, algo que parecía que no le iba a afectar, acabo haciéndole reflexionar, cayéndole como una losa. Hubo un día, que de repente se cuestionó todo en la vida, y cambió de rumbo, ahora mismo trabaja de director en un psiquiátrico en Brumath (Estrasburgo) ayudando a la gente a reconstruir su vida. Es diácono y ayuda a la gente a encontrar un sentido a su vida a través de Dios.